Más+

La tecnología superó las máquinas para entrar a nuestro cuerpo

La medicina actual debe superar la visión tradicional en que solo observan la situación biológica de las personas para solucionar, pues es fundamental en recordar que los seres humanos son entes biopsicosociales, explicó el Dr. Manuel Porras Betancourt en entrevista para Difusión Norte.

En palabras del médico especialista en neurología, neurofisiología clínica y epilepsia lo anterior se traduce en que los médicos  “debemos romper con la visión tradicional tanto de las personas como de la medicina, esta última siempre ha hablado de la solución de sus problemas pero sólo desde una perspectiva biológica, lo que se está tratando de hacer ahora, es complementar esa visión tomando en cuenta lo psicológico y lo social de cada individuo, ya que no podemos olvidar que todas las personas son entes biopsicosociales, entonces debemos de tener cuidado en los tres niveles como médicos que somos”.

Un ejemplo muy claro de la de lo anterior se puede encontrar en el uso del Botox,  planteó el Dr. Porras Betancourt,  pues es evidente que su uso no busca enfrentar una enfermedad, sino a una mejora corporal, en este caso, estética, es decir, las líneas de expresión faciales marcadas no producen algún daño corporal, pero sí psicológico en muchas personas, entonces dentro de ese marco del individuo como ente biopsicosocial, podemos ayudar a optimizar su rostro y con ello aliviar su pesar psicológico que esas marcas faciales le producen al paciente.

Estas discusiones se enmarcan en el concepto de transhumanismo, un término que plantea el uso de tecnologías para optimizar las funciones del cuerpo.

En palabras del Dr. Manuel Porras, el uso de la tecnología va mucho más allá de proponer una solución a problemas biopsicosociales; plantea que con las nuevas tecnologías pretendemos optimizar la forma en que nuestro cuerpo trabaja, de esta forma no sólo hablamos de arreglar, sino de mejorar nuestras capacidades físicas.

Como los exoesqueletos que se están trabajando, nos ayudan a mejorar las capacidades de carga que nuestros brazos solos tienen explicó el especialista, quien dictó la conferencia “Humano 2.0” dentro del Congreso Nacional de bioética y medicina humanista de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Chihuahua.

Porras Betancourt explica que Nietzsche escribió que los seres humanos usamos el intelecto ya que se nos negó tener una dentadura afilada o cuernos; somos los más débiles de entre todos los animales, y ese intelecto al que haces alusión con palabras de Nietzsche, es lo que nos permite dominar al mundo con nuestra tecnología, por ejemplo, el torero no mata al toro con sus propias manos sino con una espada, con tecnología.

Pero debemos tener en cuenta que no es lo mismo usar un saco, o algo de ropa que una prótesis robótica como un brazo o una pierna con tecnología de punta.

Son muchos los temas y las cuestiones los que surgen del tema del transhumanismo explicó especialista dentro de los cuales se encuentran importantes cuestionamientos éticos; como la cuestión económica, pues al principio sólo podrán tener acceso a estas tecnologías los que puedan pagar sumas elevadas, lo que nos lleva a pensar que aquellos que optimicen sus cuerpos y sean superiores físicamente serán solamente las personas con alto poder de adquisición.

Otro tema es la redefinición de conceptos básicos como “vida” o “ser humano”, una persona que tenga elementos tecnológicos en su cuerpo, ¿qué tan persona es esa persona? Ya que este transhumanismo busca trascender lo humano, entonces nace inmediatamente la pregunta, ¿trascenderlo es humanizar o deshumanizar al humano?, podemos preguntar a una persona tecnológicamente optimizada, ¿sigue siendo una persona?.

El Dr. enfatizó que  con estos avances y nuevas visiones debemos de tener en cuenta que las definiciones clásicas parecen quedarse cortas. Estamos entrando a una época en la que debemos detenernos a pensar cómo avanza la tecnología en estos campos y preguntarnos aspectos como los que acabo de mencionar, pues la tecnología está cada vez más ya no sólo en nuestras vidas, sino hasta dentro de nuestros cuerpos. Parece que no hay algo que limite la inmiscuida de la ciencia en el ser humano físicamente.

Entradas Relacionadas:

  • ¿Cómo podemos humanizar al médico si no es desde su docencia?”…¿Cómo podemos humanizar al médico si no es desde su docencia?”…
  • Maduro destituye a la ministra de saludMaduro destituye a la ministra de salud
  • Nueva técnica de bienestar, sumar tecnología y naturalezaNueva técnica de bienestar, sumar tecnología y naturaleza
  • Debemos escuchar también el silencio de los jóvenesDebemos escuchar también el silencio de los jóvenes

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *