Asesinan al ambientalista José Luis Álvarez en Tabasco

A mitad de año se suma el asesinato de un ambientalista más. El 11 de junio fue encontrado el cuerpo de José Luis Álvarez, a la altura del ejido Calatraba, en la carretera entre Emiliano Zapata, en Tabasco, y Palenque, en Chiapas. Se sabe que había recibido amenazas por denunciar la extracción ilegal de arena en el río Usumacinta, además era el encargado de la preservación del mono saraguato, víctima de atropellamientos en la carretera.

La semana anterior, luego de recibir la amenaza, se solicitó a las autoridades protección especial para el ambientalista, de acuerdo con Miguel Pérez, presidente de las Unidades de Manejo Ambiental en Tabasco, quien exigió justicia y protección para la familia de José Luis Álvarez y otras personas dedicadas a defender el medio ambiente, quienes han sufrido amenazas.

El mono saraguato es también conocido como mono aullador. Su forma de comunicarse es a través de rugidos, gruñidos y bramidos. El mono macho tiene el hueso hioides y la laringe muy desarrollados, y en la mandíbula una caja de resonancia que permite amplificar el sonido que emiten.

José Luis Álvarez Flores era originario del municipio de Emiliano Zapata, Tabasco, y desde hace más de una década se dedicó a la conservación del mono saraguato, una especie que no solamente es vulnerable por los atropellos en carreteras, sino también por la caza ilegal, el tráfico y la deforestación de su hábitat.

José Luis también denunciaba las extracciones ilegales de arena en los ríos, era un ambientalista reconocido en su región. Es de destacar que Tabasco es uno de los principales estados donde se han llevado a cabo el mayor decomiso por tráfico de cocodrilos y tortugas, de acuerdo con las investigaciones realizadas por InSight Crime.

De acuerdo a los datos solicitados por InSight Crime a la Procuraduría Federal de Protección Ambiental, de 2006 a 2015 se incautaron 12 mil 81 tortugas y 20 mil 346 cocodrilos. De ellos ,el 20% de las tortugas y más de un tercio de los cocodrilos se decomisaron en Tabasco, los demás se recuperaron en la Ciudad de México y en el estado de Sinaloa.

Las especies más traficadas son el cocodrilo de Morelet, pues ya que se considera que su piel es una de las mejores del mundo debido a su resistencia, elasticidad y flexibilidad. De las tortugas la especie más solicitada es la jicotea y es traficada principalmente como mascota, así también la tortuga pochitoque, la cual se  consume en Tabasco.

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Las denuncias por parte de grupos ambientalistas y defensores ambientales han sido una lucha ardua, y no sólo por el tráfico de cocodrilos y tortugas, ni tampoco sólo en Tabasco, sino a lo largo del país. La lucha es contra la tala ilegal, la deforestación, la contaminación por actividades mineras, entre otras. En lo que va de la nueva administración han muerto varias personas que se dedicaban a la defensa del medio ambiente.

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