Cristal y Arte, las vitralistas en Chihuahua superan ya 26 años de trayectoria

El vitral es una técnica complicada, por lo frágil y cortante del vidrio. Además de ser decorativo permite un juego de luz: Gabriela de las Casas

El trabajo de los vitrales es todo un arte, de acuerdo con Gabriela de las Casa, quien es dueña de Cristal y Arte, ubicado en la calle Carbonel 5102, y es de los complicados, pues se trabaja con vidrios.

El negocio  Cristal y Arte inició desde hace 26 años, ya que su dueña, Gabriela de las Casas, siempre fue curiosa del arte. Desde los 9 años ya trabajaba con óleo y escultura, pero en los viajes que realizaba con su familia a Querétaro y al sur del país empezó a llamar su atención los vitrales de los templos.

Gaby de las Casas, como es conocida, comenzó a estudiar el arte de los vitrales a los 21 años en San Miguel Allende, a los 22 inició un negocio pequeño en la lavandería de su casa haciendo portarretratos y lámparas para pedidos de su familia y amigos, pero a los 28 decidió formalizarse, se registró en el SAT y puso un negocio en Plaza Galerías.

Ahí empezó a contratar personal, en los inicios tuvo mucho trabajo por lo que llegó a contar con cinco empleados para poder entregar los encargos, en ese tiempo su esposo también Antonio Castañeda laboraba ahí, pero por muchas razones en los últimos cuatro años empezaron a trabajar únicamente mujeres. En la actualidad únicamente laboran la dueña y la señora Martha Valdez, quien también tiene una experiencia de 26 años trabajando con vidrio y 20 años colaborando con Cristal y Arte.

Aunque el negocio ya lleva más de 20 años funcionando, su dueña estudió también la carrera de Relaciones Comerciales y la Maestría en Administración, pero desde niña hasta ahora se ha involucrado con el arte. Con su negocio ella tiene muy claro que el cliente es parte del equipo al momento de crear los vitrales, pues además de ella que se encarga del diseño y Martha de cortar y ensamblar las piezas, el cliente interviene tomando decisiones de colores e inclusive forma del vitral.

Para la dueña, quien también es la diseñadora, la encargada de ventas e inclusive llegó a ser instaladora de los vitrales, lo más idóneo es que estos sean de acuerdo con el estilo de casa, es decir, en las casas contemporáneas no sugiere instalar vitrales de flores, sino, los que tienen formas más geométricas, para que combinen. Aunque ella dice que quien finalmente decide es la clientela.

La inseguridad de 2006 fue un duro golpe para Gabriela en su negocio, pues las ventas bajaron y tuvo que despedir a su esposo

Durante sus 20 años como un negocio formal, de los tiempos más duros que le tocó vivir fue en 2006, con la crisis de inseguridad cuando la venta de vitrales se vino abajo, pues las extorsiones estaban presentes todo el día. Aunado a esto muchas constructoras cerraron y la carga de trabajo fue menor.

Con esa misma crisis llegó otro reto, pues en ese entonces Gaby de las Casas trabajaba con su esposo y dos mujeres más, y los ingresos eran insuficientes, por lo que tuvo que despedir a su esposo con todo el dolor.

Retos como son el camino que Cristal y Arte ha logrado sortear, también con la llegada de productos chinos en cuanto a creaciones de lámparas y portarretratos resultó ser una fuerte competencia, así que actualmente se dedican a hacer vitrales grandes. Sin embargo, éstas no han sido las únicas dificultades, pues actualmente la producción de vidrio ya es muy escasa y no se hacen de todos los colores ni texturas.

Gaby entiende los retos que enfrentan las mujeres trabajadoras, por lo que ha construido un ambiente laboral amigable

Lo que la llevó a tomar la decisión de prescindir de su esposo, fue que él encontraría un empleo de manera más rápida a comparación de sus trabajadoras. En este sentido Gaby tiene una forma de pensar muy particular y progresiva, pues siempre ha tenido muy en claro las dificultades de las mujeres, quienes a parte de trabajar se dedican al cuidado de sus hijos y de su casa, por lo que decidió que el horario sería de medio tiempo de lunes a viernes.

Ahora que ella tiene a sus hijos, siempre busca el tiempo para ellos y para su familia, pues considera importante hacerlo. Pero también busca el tiempo para dedicarle a su espacio, ya que es donde ella hace realidad su arte a través de la combinación de vidrios y figuras, el cual tiene su magia, pues dependiendo la luz y la posición con que se mire, el color y la perspectiva cambia.

Hablando de los retos que enfrentan las mujeres, Gabriela recuerda que cuando recién empezó, al ser un negocio donde en su mayoría eran hombres, tenía que sacar la casta, pues en muchas de las ocasiones sus competidores le llegaban a quitar las ventas que ya había cerrado con los clientes, ofreciéndoles un menor precio, por lo que aprendió a buscar la forma de que esto no ocurriera, ya que perdía lo invertido.

De las creaciones que más recuerda fueron los vitrales de las cuatro estaciones del año para una hacienda, donde empleó una gran variedad de vidrios de colores. También ha instalado ocho vitrales de ángeles en el Templo de Santa María de los Ángeles, con esa obra duraron 4 meses con tres trabajadores. Y en su local en una de sus ventanas tiene un sol con 3 tipos diferentes de vidrios. Ella define que los vitrales no se venden por metro cuadrado, sino por diseño y por material, ya que éste tiene un costo distinto.

Gaby nos platicó que para unir ciertos vitrales se utiliza soldadura, y ella fue la primera en Chihuahua en usar soldadura sin plomo, porque explicó que es importante mantener la salud de sus trabajadoras y tener un respeto por el medio ambiente, para asegurar un futuro a sus hijos.

Cristal y Arte cuenta con precios para todos los presupuestos, y del 8 al 30 de marzo tendrá disponible un descuento de 10 a 15% para las personas que mencionen haber leído éste artículo en el periódico digital Difusión Norte. Para agendar una cita y hacer un presupuesto puede comunicarse al número: (614) 427-45-20, con Gabriela de las Casas.