¿Me pongo vestido o mejor no? la realidad de acoso callejero

Chihuahua ocupa el sexto lugar en acoso comunitario o callejero, las adolescentes de secundaria son quienes lo sufren

 La violencia comunitaria o mejor conocida como violencia callejera en el año 2016 prevaleció entre las mujeres mayores de 15 años, en áreas urbanas un 41% en tanto que en el área rural fue de 18.3%, es decir, que las mujeres que sufren con más frecuencia este tipo de violencia son las que viven en la ciudad.

Según la Encuesta Nacional Sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2016, de un millón 363 mil 182 mujeres encuestadas, 515 mil 739 han sufrido violencia comunitaria a lo largo de su vida, de ellas 191 mil 066 han vivido violencia emocional, 125 mil 134 violencia física y 456 mil 412 sexual.

Testimonios sobre el acoso callejero:

Denis, cuenta que por lo regular es en la calle cuando ha sufrido acoso, “cuando baja uno del camión o te diriges a la escuela o al trabajo y típico los piropos que no son halagadores o también las miradas acosadoras que son las que más he sufrido y no es nada bonito. Muchos hombres al decirles que te sientes acosada se defienden con el argumento de  que te están haciendo un favor, supuestamente y lo notan. Lo hacen como si te estuvieran alagando, pero pues no, hay palabras que se sienten como halago, pero es acoso, la forma en la que lo hacen, el morbo, las miradas, el tono, las palabras o las cosas que te dicen, cuando pasa esto la mayor parte los ignoro, aunque hay veces que voltea uno y los ve con cara de “muérete” o les dice unas groserías, pero por precaución los ignoro o trato de evadir el lugar, en especial los que son solitarios durante las primeras horas del día o en la tarde”

No suelo hablar del tema con otras personas a menos que alguien me esté acompañando en ese momento, con mi mamá o mi hermana y ahí lo comentamos, finaliza Denis.

¿Me pongo vestido o no?

Verónica da su testimonio acerca del acoso callejero, señala que lo ha vivido de manera verbal “Ahorita me viene a la mente  una vez que iba cruzando la calle, estaba un tipo en su troca y cuando yo iba a pasar me la aventaba, entonces decidí alejarme y de nuevo volvió a aventármela, luego decidí irme por la parte de atrás, por la cajuela e hizo lo mismo, la intensión era que yo me fuera por la parte delantera de su vehículo, entonces me enoje mucho y le grité, fue lo único que se me ocurrió y corrí para poder pasar por la parte trasera, no le dí el gusto”

Verónica cuenta que otra manera de acoso son las miradas insultantes, haciendo que a veces la mujer tenga paranoia de ser acosada. “La sociedad o los mismos hombres han causado  este tipo de miedo en nosotras, es como pensar en ponerte vestido, pero mejor no o ponerte bonita, pero mejor no, porque a veces hasta sientes culpa o te sientes hasta merecedora de que te digan cosas porque la sociedad así lo ha hecho, así nos ha hecho, igual sigo esperando que en algún día cambie”

En los meses de agosto y septiembre del año 2016, en la entidad 13 mil 464 mujeres sufrieron acoso callejero, 8 mil 240 de tipo emocional, 5 mil 658 de manera física y 12 mil 798 de forma sexual.

Por otra parte, 85 mil 500 mujeres indígenas de 15 años a más han sufrido violencia comunitaria en tanto que 162 mil 716 respondieron que no han sufrido ningún tipo de incidente, 430 mil 239 que no hablan lengua indígena y que no se consideran como indígena también respondieron que sufrieron acoso callejero.

De acuerdo a la ENDIREH, en México el rango de edad de mujeres que sufren más violencia comunitaria es de 15 a 24 años con 155 mil 731 casos y le siguen las mujeres de 35 a 44 años, 18 mil 561; 25 a 34 años, 114 mil 159; 45 a 54 años, 61 mil 939; de 55 años y más 54 mil 830 y en cuanto a mujeres que no especificaron su edad fueron 519 casos.

De acuerdo al tipo de escolaridad las mujeres que más sufren violencia comunitaria son de secundaria con un total de 10 mil 901 casos y las que están en educación superior con 9 mil 835 casos. Pero en todos estos casos, el tipo de violencia comunitaria que sufrieron con más frecuencia fue en la emocional.

En los lugares en donde sucede la violencia comunitaria es en las calles, parques, así como el transporte público, mercado, plazas, tianguis, centros comerciales, cantinas, bares, antros e iglesias o templos.