Diversas estratagemas evasivas, incluido el incumplimiento de dos sentencias, ha realizado el empresario Luis Homero Ávila para no atender a sus tres hijas
El 31 de diciembre de 2018 se realizó la audiencia en que se sentenció a Luis Homero Ávila a realizar el pago de alimentos para sus tres hijas, el pago de reparación del daño, la omisión del derecho y nueve meses de prisión. Sin embargo, el juez Fernando Saláis Ortiz, sin mediar explicación, ordenó la invalidez y reposición de dicha audiencia, pues el personal del Tribunal Superior de Justicia olvidó grabarla.
Mientras Luis Homero Ávila, empresario del ramo de la construcción, compró su nueva casa en un fraccionamiento exclusivo y tras volver de un viaje cambió su camioneta por una de reciente modelo. Sus hijas, dos de ellas adolescentes, se han visto en la necesidad de encontrar trabajos de medio tiempo para no perder la escuela y alcanzar el gasto semanal de su hogar.
Desde hace 12 años buscan que se ejerza su derecho a pago de alimentos por parte de su padre, sin embargo, éste siempre ha encontrado la manera de evadirlas. Ahora la pregunta que enfrenta la mayor es sobre la posibilidad de ingresar a la universidad o encontrar un trabajo de tiempo completo para ayudar a su madre con el gasto y permitir a sus dos hermanas, de las cuales una es infante, tener la oportunidad de estudiar.
Éste es el escenario en el cual, luego de diversos amparos el 30 de diciembre se ejecutó la orden de aprehensión por el delito de evadir el pago de alimentos contra Luis Homero Ávila y se realizó audiencia día siguiente, en la cual se fijó un pago de reparación del daño, ante lo cual el padre expresó: “antes de que ellas vean mi dinero, voy a prisión”.
Sin embargo, de forma inexplicable el 15 de enero las víctimas fueron avisadas sobre una nueva audiencia que se realizará hoy 21 de enero a las 14:00 horas, la cual suplirá a la ya realizada a finales del año pasado, ya que les informaron que “no existe registro de la audiencia, pues no se grabó”, razón por la cual se tendrá que reponer dicha sesión.
El juez Fernando Saláis, quien también fuera aspirante a magistrado, no explica la razón de esta omisión en el proceso o la causa del Juzgado para no haber grabado, a pesar de que se cuenta con equipo especializado para ello. Simplemente reagendó fecha y enfatizó que de no presentarse el ministerio público que lleva la defensa de las tres menores, recibirá una multa por ausencia.