El sistema de captación de agua se evitan las inundaciones además de permitir que los acuíferos se recuperen
Isla Urbana es un proyecto para captar agua que busca garantizar el suministro del vital líquido a 750 mil personas en la Ciudad de México surgió de la investigación de tesis para obtener el grado de diseño industrial de Enrique Lomnitz y Renata Fenton.
En la Ciudad de México, el agua es un tema de contradicciones, expresan los integrantes de Isla Urbana, pues mientras que hay colonias que tienen 800 litros cúbicos diarios por persona hay otras que deben sobrevivir con solo 20 litros cúbicos por persona.
Otra contrastes es el que las personas se relacionan con el tema del agua sólo en desastres, cuando hay inundación o bien, por su escaces esto debido al desaprovechamiento del agua pluvial, pues a diferencia de otras ciudades con carencia en CDMX llueve todos los días, actualmente esta dicotomía se se ha convertidoen un caos.
El proyecto de captación del agua surge a partir de que hay 250 mil personas en la Ciudad de México que ni siquiera tienen acceso a la red de agua, con el sistema se subsana una carencia aprovechando 750 litros que se genera por la precipitación logrando con ello la gobernanza del agua, con ello las personas controlan el agua que usan, además de que con ello se evitan inundaciones y permiten la nutrición de los mantos acuíferos.
De esta problemática surge la Isla Urbana con un sistema de captación de agua de lluvia, el cual funciona a través de canaletas en los techos de las casas, con este método es posible recolectar derrama pluvial, el líquido pasa por un filtro de hojas que se encarga de retener toda la basura.
El segundo paso de la cosecha del agua es purificarla. Tras pasar el líquido por el primer filtro de hojas a un separador de primeras lluvias que lleva el nombre de Tlaloque, este separa la parte más contaminada del aguacero y mandan el agua limpia a la cisterna. Después como tercer paso va al reductor de turbulencias que permite que el agua entre a la cisterna de forma calmada sin remover sedimentos que se acumula al fondo del contenedor.
El cuarto paso es el dosificador de cloro que consiste en un flotador que dispersa una cantidad del sanitisante para eliminar patógenos. Después está la pichancha flotante que succiona el agua evitando mover sedimento.
Por último el agua pasa al tren de filtros, el primer filtro quita sedimentos menores a 50 micras, el segundo filtro es de carbón activado y se encarga de eliminar los contaminantes más finos, además de mejorar el olor y sabor, en esta parte el agua se puede utilizar para baños y lavar trastes, pero si se quiere beber el agua debe pasar por un filtrado extra.
De acuerdo a Marisol Tarriba, vocera de Isla Urbana señaló que la asociación ha instalado ya 8 mil 200 sistemas la mayoría en Ciudad de México.
También están presentes en 19 estados más, destaca Jalisco donde trabajan desde 2012 con las comunidades Huichol. En Oaxaca se implementó este sistema además de talleres para la concientización en la cosecha y uso del agua. En Chihuahua se encuentran en el pueblo mágico de Creel y municipio de Bocoyna.
Dentro de los proyectos sociales implementados en zonas de bajo recursos, el 80% del costo de la instalación portan fondeadores, es decir, gobiernos, empresas u otra organización, el 20% restante lo cubre la familia beneficiaria. Los porcentajes no son fijos y se modifican dependiendo el proyecto, la co participación de beneficiarios se aplica para aumentar el índice de adopción de esta ecotecnología para obtener resultados positivos.