Es difícil visualizar la migración como algo más que una persona dejando su país para trasladarse a otro, y por cuestiones que están lejos de lo ilícito. Para Yasmin Rodríguez y Julieta Morales, ser migrante es pertenecer a un municipio diferente, a una cultura distintia, y tratar de abrirte paso para cumplir tus metas, más allá de la discriminación, las agresiones y las luchas personales. “Estampa migrante” buscar dar un rostro a quienes migran y la sensibilidad a quienes nos toca verles pasar.
Las artistas, Julieta Morales Anda y Yasmin Rodríguez Torres, licenciadas en Artes por la UACH, y quienes forman Doble Tinta Gráfica, se han enfrascado en un viaje por el reconocimiento y la sensibilización hacia el movimiento migratorio con un proyecto al que denominaron “Estampa migrante”.
Hace dos años nació la inquietud por poner en marcha un proyecto con el cual pudieran acercar el arte a estos grupos, que consideran algo abandonados a la hora de hablar de cultura. Por lo que, tomadas de la mano del grabado, área en la que ellas se especializan, se acercaron a la Casa del Migrante, luego de ser invitadas al Festival de la Bestia, y plasmaron en una manta rectangular las huellas de los zapatos de quienes ahí se encontraban, para recrear el difícil camino por el que transitan miles de personas luego de dejar sus hogares.
Ambas somos migrantes, tuvimos que salir muy jóvenes para poder estudiar la universidad, sabemos lo que es vivir lejos de casa, la incertidumbre, acoplarte a un nuevo lugar: Julieta Morales.
Encontrado el conducto, las artistas optaron por aferrarse a las herramientas que les parecían sencillas de usar, como lo son las gubias o navajas y el linóleo, y que de alguna manera lograban dar la catarsis, la liberación de las personas migrantes con quienes participaron.
A pesar de que este proyecto nació en sí hace dos años, fue apenas este 2019 que empezaron con el linograbado, pues Pacmyc (Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias) les otorgó el financiamiento para comenzar con los seis talleres, los cuales estuvieron repartidos dos en Casa del Migrante, uno en la Granja Hogar, donde trabajaron con niños de migrantes, sobre todo ralámulis; Polifórum Universitario y en Parral, donde se enfocaron en los estudiantes foráneos y público en general, y en Surcando el Arte, de Cine Comunar.
Los talleres se enfocaron en tres líneas de acción, que fue trabajar con migrantes del mismo estado, es decir, con movilidad de municipio a municipio, como estudiantes foráneos y las comunidades menonita y ralámuli; además con chihuahuenses que vivieron en otros estados de México y regresaron, o que se son de otros estados y se quedaron aquí permanente; y por último migrantes de otros países.
Tanto Yasmin como Julieta son migrantes de igual forma, provienen de Jiménez y de Delicias, respectivamente, por lo que se vieron reflejadas en el sentimiento de quienes participaron de estas actividades. La necesidad de dejar el hogar que aman por buscar cumplir los sueños, aún a pesar de anhelar el regreso, es una de las situaciones que más las ha marcado y algo que, según comentaron, muchas personas de otros municipios no se dan cuenta hasta que se ven en el espejo de la migración.
Al principio, mencionan que los talleres se hacían con una temática libre, y eran sesiones largas, todo para ayudar a despejar la mente. Pero en la exposición que tendrán de “Estampa migrante” podremos ver los sellos de los grabados que se trabajaron, los cuales son todos los rostros de la migración, la cara de esas personas que han emprendido el camino, y que muchas no han terminado, que crea un espacio de reflexión y comunicación, donde la excusa de estos autorretratos en linograbado es plasmar el lado humano de todas las estadísticas y números que vemos en la televisión.
Al pensar en “Estampa migrante”, vieron la necesidad de tratar a este grupo específico, luego de notar el crecimiento de la población migrante, sobre todo de quienes vienen desde Centroamérica, sin embargo, también atendieron a estudiantes foráneos, ralámulis y menonitas. Y para complementar los grabados, además compartirán las experiencias migratorias de las y los autores, donde explican los factores que les hicieron moverse y las situaciones de riesgo a las cuales se han expuesto para lograr el final que anhelan.
Para las artistas, la sensibilización en torno a la migración es poca, nos olvidamos que quienes migran son personas, con historias, con sueños y necesidades, cuando lo que vemos usualmente es la falsa idea del vandalismo y la agresión, una imagen que se nos ha formado a causa de alguna que otra situación ajena, muchas veces, a nosotras mismas. E ignoramos que en realidad todas tenemos algo o mucho de migrante dentro o a nuestro alrededor.
Invitan a la inauguración de “Estampa migrante”
Julieta y Yasmin invitaron a la exposición de “Estampa migrante” este próximo 5 de septiembre de 2019, en Plaza Cultural los Laureles, y pidieron un apoyo para la Casa del Migrante de: pasta dental, cepillos de dientes, rastrillos, azúcar o aceite. Así que si quieres ayudar y ver esta maravillosa exposición, no olvides asistir.
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