Fueron 100 años de vida los que tuvo Mario Bunge, el físico y filósofo más prolífero de América Latina, autor de 70 libros y poseedor de más de 20 honoris causa.
Mario Bunge falleció el 24 de febrero de 2020 en Montreal, Canadá, donde vivía desde 1966. Nacido en Argentina, en 1919, su primo le llamaba “el experimento”, según contó durante su última entrevista en honor de su cumpleaños número 100.
“La mayor parte de la gente vive gracias a que cree en la verdad. Creen que el pan es nutritivo, creen que las vacaciones son necesarias, creen que hay injusticia social”. –Mario Bunge.
Sus padres, Augusto Bunge y Rosario Marie Müser, decidieron ensayar con él un nuevo método de crianza que consistía en dejarlo en libertad y no castigarlo, algo muy inusual para la época, de ahí su apodo.
El filósofo, mencionó que era un mal alumno durante sus primeros años, pero se debía a que le interesaban más otras cosas que las que enseñaban en la escuela, como la filosofía, literatura y política. Sin embargo, al terminar el bachillerato, el cual hizo por su cuenta, decidió inscribirse en Física, en la Universidad Nacional de La Plata.
Aunque su primer interés era la filosofía, dijo que había comprendido que para entenderla primero necesitaba saber de física, tener una relación más cercana a ella, por lo que comenzó a estudiarla como un medio para hacer filosofía.
No obstante, con el tiempo, la física fue muy persistente en él, tanto que terminó alejándolo de la filosofía durante algún tiempo, y al llegar con la mecánica cuántica se reencontró con ella.
Durante su vida se dedicó a perseguir la verdad, de la cual dijo que era más fácil para las personas asegurar que ésta no existía, a seguir buscándola. Además, siempre se negó a aceptar verdades que no se basaran en evidencias científicas.
A los 19 años fundó la Universidad Obrera Argentina, luego creó y dirigió la revista de filosofía Minerva. Al mudarse a Canadá, dio clases de Lógica y Metafísica hasta los 90 años, pero tuvo que jubilarse porque tenía problemas con el oído y le molestaba no ser tan ágil como antes.
Publicó casi medio millón de investigaciones y publicó más de 70 libros, entre ellos: “Teoría y realidad”, “Filosofía de la física”, “Epistemología, materialismo y ciencia”, “El problema mente-cerebro” y “Economía y filosofía”.
Tuvo la distinción Guggenheim Fellowship y Premio Ludwig von Bertalanffy 2014, así como el Premio de Asturias de Comunicación y Humanidades 1982. Y recibió más de 20 honoris causa.
Mario Bunge en contra de las seudociencias
Mario Bunge tenía un historial en contra de las seudociencias, entre ellas el sicoanálisis. Aseguraba que cuando una persona hacía una afirmación acerca de la realidad, era necesario, su deber, justificar esa afirmación.
Además, tenía la certeza de que la población en general mejoraría muchísimo si tuviera una mayor formación científica, por lo que no apoyaba que las personas gastaran más en acudir con acupunturistas, homeópatas o sicoanalistas, en lugar de médicos certificados.
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