La rifa del avión presidencial de México podría estar cada vez más cerca de ser una realidad, de acuerdo con lo dicho por el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia matutina del 28 de enero de 2020.
El dinero de la venta del avión presidencial estará destinado a comprar una parte de los equipos médicos que se requieren actualmente, sin embargo, no se ha concretado ninguna venta hasta el momento, aunque aún hay la posibilidad de que el primer ministro de Canadá, Justin Trudea, desee adquirirlo, pues el suyo se descompuso.
“Mi preocupación es que se trata de un bien que significa mucho dinero, y el dinero es una tentación, es la mamá y a veces el papá del diablo, entonces echa a perder el dinero a veces a las personas”. –Andrés Manuel López Obrador.
No será hasta la próxima semana, los primeros días de febrero, cuando se decida a ciencia cierta cómo será que se procederá en el tema del Boeing 789.
De no encontrar quién compre el avión presidencial, entonces pasarán al plan que en días pasados parecía muy sorpresivo y hasta imposible: la rifa de la aeronave.
La meta es conseguir 2 mil 500 millones de pesos de la venta del avión presidencial, por lo que hasta el momento se tienen contemplados 6 millones de números, con un costo de 500 pesos cada uno. Con este número de boletos se prevé la ganancia de 3 mil millones de pesos, dinero del cual se debería descontar la comisión de las y los vendedores.
De la totalidad de los boletos, 4 millones serán para el sector privado que quieran participar, es decir, estarán disponibles para empresas y los planes que quieran poner sobre ellos. Mientras que los 2 millones restantes podrían ser vendidos a la población en general a través de la Lotería Nacional.
De ganar el avión presidencial, se tendría un año de mantenimiento, operación y estacionamiento gratis en Santa Lucía o en el Aeropuerto de la Ciudad, hasta que se decida qué hacer con él. Y en caso de que quisiera venderlo, no podría rematarlo, y el dinero podría estar en un fideicomiso en el Banco de México para capitalizarlo y que se vayan juntando los intereses.
Andrés Manuel López Obrador, externó su preocupación sobre una posible ruptura familiar para quien se gane el avión, pues dijo que el dinero es una tentación y echa, a veces, a perder a las personas, por lo que él sería responsable de eso y no podría cargar con esa culpa. Por lo que pidió que, en caso de ganarlo, se debe ser prudente y tener en cuenta que será un bien familiar.
Además, dijo que aún faltan muchos detalles para afinar, pues está el asunto de los impuestos que se le cobran a quienes ganan la Lotería Nacional, además del detalle de que ésta sólo da premios en efectivo.
Un avión presidencial único en el mundo
En 2012, durante el sexenio de Felipe Calderón, se evaluó la posibilidad de comprar un nuevo avión presidencial, cuyo costo sería de 750 millones de dólares, y para el 30 de julio de ese año se aprobó el nuevo avión presidencial que sería destinado para giras internacionales, un Boeing 789, único en el mundo.
Sin embargo, el avión José María Morelos y Pavón no fue entregado hasta 2015, en el sexenio de Enrique Peña Nieto, cuando se sometió a pruebas por parte de la Federal Aviation Administration de los Estados Unidos, en el aeropuerto Dallas Love Field, y el presidente pudo estrenarlo hasta el 10 de febrero de 2016.
El avión presidencial puede transportar hasta 80 pasajeros, tiene equipos en telecomunicaciones satelitales e internet y una vida útil de 25 años.
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